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Estimado lector, le damos la bienvenida a la Comunidad Pilares de Sabiduría de Editorial Kier, un espacio de reflexión pensado para el encuentro, la presentación y difusión de obras literarias vinculadas con la Tradición Esotérica Occidental. Desde hace más de un siglo, estos libros publicados por Kier han sido guía y han dado sentido a la búsqueda espiritual de miles de personas que, como Usted, se adentran en el mundo sin fronteras que se extiende en el campo de la sabiduría trascendente. Pilares de Sabiduría es un lugar de cita para aquellos que buscan el atanor en el cual podemos realizar la Gran Obra del encuentro con nuestro propio Ser.

lunes, 24 de septiembre de 2012

Luz en el Sendero


Luz en el Sendero es un gigante de la literatura esotérica. Un libro capital que influyó de modo radical en la forma de percibir la espiritualidad por millones de personas a lo largo del último siglo. Escrito por Mabel Collins en 1885, mantiene su vigencia tal como el día en que fue publicado por primera vez, porque en sus páginas el lector encuentra lo que promete su título: La Luz que le permite continuar la marcha.



Publicado por Editorial Kier forma parte de un selecto grupo de obras que contribuyeron a redefinir el sentido de la búsqueda interior sobre la base de preceptos que, hasta ese momento, eran sólo conocidos por una selecta minoría de adeptos en los países occidentales. Sus dos conjuntos de 21 Reglas, junto con los Comentarios y las Cartas a los Estudiantes, conforman un cuerpo de doctrina espiritual incomparable que hace de este libro un verdadero catecismo de la filosofía oculta, sólo comparable a otro clásico que lo completa y lo explica, nos referimos a “La Voz del Silencio”, también publicado por Kier y que comentaremos en breve.

“Luz en el Sendero” se nos presenta con un enunciado, aparentemente simple, de las Reglas fundamentales para la búsqueda de la sabiduría:

“Estas reglas han sido escritas para todos los discípulos: Síguelas. Antes que los ojos puedan ver, deben ser incapaces de llorar. Antes que el oído pueda oír, tiene que haber perdido la sensibilidad.  Antes de que la voz pueda hablar en presencia de los Maestros, debe haber perdido la posibilidad de herir. Antes de que el alma pueda erguirse en presencia de los Maestros es necesario que los pies se hayan lavado en sangre del corazón…”

Sin embargo, cada una de ellas encierra una multiplicidad de enseñanzas e interpretaciones que son inmediatamente abordadas en dos conjuntos de 21 preceptos que impactan por su belleza espiritual y por el desafío que imponen al alma peregrina. No se trata de una espiritualidad pasiva sino de una muy activa, en donde la voluntad del discípulo y su disposición a seguirlas es el único camino capaz de llegar a la realización.

“Luz en el Sendero” es a la vez una brújula y un laberinto. Sus Reglas parecen seguir un ordenamiento matemático, porque a aquello que debe matarse, a aquello que debe desearse y a aquello que debe buscarse, se contrapone un propósito que da sentido a cada una de ellas, en una lógica abrumadora que nos hace reflexionar una y otra vez sobre el sentido de nuestra vida y de nuestra búsqueda. Como la antigua premisa de las Escuelas de Misterios que decía en latín “Perit ut Vivat” (morir para vivir), esta joya de la literatura esotérica habla de la muerte de lo profano para obtener el nacimiento de lo sagrado.

No es un libro para indecisos. “Busca en tu corazón la raíz del mal y arráncala”, es su mandato claro y preciso. “Sólo el fuerte puede hacerlo” es su advertencia. Se trata de una obra que nos acompaña a lo largo de la vida, porque el sendero del que habla es la vida misma, y la Luz que nos propicia es la que alumbra cada uno de nuestros pasos en la peligrosa senda que conduce al Templo de la Sabiduría.

Al igual que muchos otros libros publicados por Kier, “Luz en el Sendero” ha sido el cimiento, la base sólida sobre la que se edificaron centenares de otros posteriores en donde el lector atento puede encontrar el “eco” de estas obras clásicas. Difícil de clasificar, como ocurre generalmente con las obras excepcionales, no pertenece ni a Oriente ni a Occidente. Su mensaje puede aplicarse a cualquier escuela en cualquier geografía, porque aquél que se aventura más allá del mundo material y pretende emprender la lucha consigo mismo, participa de los mismos riesgos, los mismos obstáculos y los mismos desafíos.

La vida de su autora es tan esquiva como el origen de estas Reglas, seguramente antiguas y milenarias. Reglas que nos otorgan un mapa de ruta, una descripción de aquel que ha visto el camino y nos advierte de lo que nos espera, antes de emprender la marcha. Como ya hemos dicho, un libro esencial, imprescindible, atemporal. 

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